Luego de pasar por las oficinas, sus hogares, e incluso las improvisadas cafeterías, hoy los trabajadores remotos tienen un nuevo espacio para trabajar: los hoteles. Estos ofrecen nuevos ambientes innovadores que aportan la combinación ‘trabajo y ocio’ para su vida.
El sector hotelero se convirtió en una de las opciones más viables para trabajar. Según un estudio elaborado por la empresa Actiu, sobre el uso y el potencial de los espacios híbridos, afirma que los entornos que serán claves en el futuro son las oficinas con nuevos usos (65,6%); seguidas por los coworkings (51,2%) y, en tercer lugar, los hoteles (39,5%).
A su oferta habitual como salas de reuniones o eventos, suman nuevos espacios polivalentes híbridos para trabajar de forma independiente o en equipo. Desarrollan nuevas áreas comunes para crear zonas de coworking que inspiran la creatividad y ámbitos de networking.
Estos espacios buscan destacarse y ofrecer un diferencial. Son ambientes con diseño, funcionalidad, amigables y, sobre todo, seguros. La tecnología y la conectividad son el fuerte de estos ambientes que garantizan, además, privacidad, comodidad y bienestar.
A su vez, el modelo propuesto por los hoteles utiliza los espacios de forma más eficiente y promueven la sostenibilidad. Esta oportunidad aporta a la reducción de la huella de carbono ya que las empresas tienen menos requisitos de propiedad y menor desplazamiento de sus empleados.
Así es como los hoteles han de convertirse no solo en lugares perfectos para desconectar, sino también, para trabajar y colaborar.